PAS-PRO hace referencia al amor sin coste y el amor con coste. Pero ambos tienen satisfacción y agrado y, posiblemente, más el segundo, porque involucra más la proyección, propiedad, generatividad del yo.
El coste, el dolor, del PRO es la construcción más personal, asertiva, creativa del Yo. Impregna de significado y de purpose toda la persona. No es una pérdida. Es una ganancia.

También por extensión, podríamos generalizar y extender el PAS a todo aquello que el sujeto vive agradablemente sin esfuerzo o coste.
Se  podria hablar, pues, de actividades individuales PAS (aficiones, hobbies, deportes) y otras más PRO aunque también el deporte, por ejemplo tiene o precisa una dosis importante de esfuerzo o coste.

Este paradigma nos ilustra bien que cuando hay PAS, la dimensión PRO (esfuerzo agónico en una subida) para alcanzar una meta PAS (logro, prestigio, premio) esconde o disminuye mucho la percepción del coste.

El PAS tiene mayor emocionalidad. Menor controlabilidad. EL PRO mayor racionalidad y controlabilidad.
Inevitabilidad. Dejarse llevar. Intensidad ?

El PAS se mueve bien en el ocio y el intercambio de afecto, caricias.
Pero el espacio de la convivencia precisa del PRO.

El equilibrio Pas-Pro pasa por ciertas condiciones

• Proporcionalidad agrado-costo
• Cambios temporales percepción agrados.
• Valores
• Intereses
• Aficiones
• Proyecto vital
• Proyectos temporales
• Roles
• Tareas
• Equilibrio distributivo costes revisado periodicamente.
• Racionalización ejecuciones
• Consenso decisiones.
• La aplicación concreta del PRO debe ocurrir como suplemento a la tarea prevista de cada uno. Debe asistir y adornar a la espontaneidad del momento, de la necesidad, de la fatiga del otro. Es un regalo para el bienestar del otro, en las actividades.